Días de paseos maritimos

 

En 17 días he hecho cuatro viajes en avión, todo un record para mi. Existe algo en los aviones que me emociona, cuando estoy en el aeropuerto y les veo subir me parece una de las cosas más alucinantes del mundo, de hecho me encanta cuando se desvían de su ruta y pasan por encima de casa tan bajos que puedes ver la compañía aérea. A mi esto de que cualquiera pueda volar me parece una de las mejores cosas que han ocurrido en los últimos años, pero me siento un poco fuera de lugar, como si volar fuera cosa de hombres de negocios o de gente con dinero, por eso siempre me pongo muy mona, como si fuera a ir a cenar, también porque volar me da mucho miedo y si me pongo mi ropa preferida voy más tranquila. Me pasa lo mismo si voy en el tren, en preferente, bueno solo he ido dos veces, hace unos veranos mi padre consiguió unos billetes en el TALGO en verano en una oferta especial, yo llegué a Málaga con un contentillo que paqué. A pesar de quedar como una paleta, yo le decia que si a todo a la azafata, total nadie me conocía y para algo lo ofrecían digo yo, un matrimonio frances que iba a mi lado también, asi que no fui la única, todo hay que decirlo. Recuerdo que empezamos el viaje con un Málaga Virgen, que de recuerdos que era el único alcohol que me gustaba en mi infancia, el vino nunca me gustó, mis padres me dejaban beber uno de aquellos mini vasos, supongo que porque era una manera en el crudo invierno castellano de recordar nuestra adorada Andalucía. Después un vermut, la comida con vino tinto y la copa de después. Total que cuando llegamos yo tenía una alegría en el cuerpo … y aquel viaje lo recordaré siempre.
Así que lo del avión para mi es el novamás y no me importa ir 3 horas antes a la T4 y recorrermela de arriba abajo varias veces, del rojo al azul y del azul al rojo, a mi me parece una maravilla. Estos dos últimos vuelos han sido un poco más movidos, mucho aire en tierra, nunca había aterrizado en Málaga por el mar, y vi el apartamento y la playa perfectamente justo debajo de mi ventana, ay que ilusión. Y ayer también salimos por el mar y justo pasamos por debajo de la plaza de toros y la Alcazaba, al llegar a Madrid lo que más ilusión me hace es ver mi pueblo desde el aire.
Estos días han pasado volando, como no, pero por otra parte han cundido mucho y vuelvo con la sensación de que han sido muchos más días, es lo bueno de madrugar. Además que el tiempo ha estado muy revuelto, realmente sólo ha habido dos días de verano, pero curiosamente a las 8 de la mañana el sol brillaba espléndido, el cielo azul andaluz y ni una pizca de aire. Ha sido lo mejor de la semana. Y además es increíble lo entretenido que es un paseo marítimo al amanecer. Los rezagados que vuelven a casa con pintas como el de la foto vestido de verde fosforito (recomiendo pinchar en la foto para verlo en grande :p), y eso fue el primer día, yo alucinaba jaja, el de la limpieza que va con la manguera, los que van con el camión de la basura, el que va con el tubo que echa aire, los que van con la furgonetilla pequeña (ignoro porque esas bolsas de basura no las cogian los del camión), el señor de toda la vida que va con el recogedor y la escoba, el de las botellas de reciclaje, los que estan limpiando los pubs para cerrar o abrirlos, los de las hamacas que empiezan a poner las tumbonas, los de los chiringuitos más madrugadores, los repartidores del pan y del pescado de los chiringuitos, los señores del puesto de chuches y de algunas tiendas. Las señoras de la limpieza de los restaurantes. Y luego los paseantes y corredores de todas las edades, viejos, jóvenes y maduritos. Encima los sábados y domingos habia un torneo de futbol de niños de unos 12 años de distintos pueblos, asi que al volver el paseo estaba lleno de niños vestidos de futbolistas y medio pueblo detrás, parecía una romería.
A mi vuelta del paseo allí estaba el Toby en la zona de la playa donde estan los gansos que le encanta correr para hacer que les coge aunque se queda en la orilla. Le hacía levantarse a mi padre para sacarle ya, yo no me le llevaba porque con él no se puede pasear, él quiere salir pero a esas horas está legañoso y dormido. Así que terminaba el paseo echando unas carreras por la playa.
Siempre he pensado que es maravilloso tener un lugar donde siempre se ha sido feliz y donde las penas se van, los problemas se diluyen, y todo se cura.

 

Gracias al blog area 51 del corazón, me pude bajar un single de esta banda griega que me encanta
The Crooner
Over the rainbow, esta canción la descubrí en un recopilatorio del rdl que me encantaba. La he escuchado un millón de veces.
Smiles
Love makes the sun shine bright