sábado, agosto 14, 2010

Verano Murakami



Mañanas de frío, seguro que en burgos se han dejado la puerta abierta, aunque esto no es nada, allí es mucho peor, las chaquetas no abrigan. el jueves al final del concierto con sufre mamón ya había salido el aire, menos mal que me llevé la chaqueta, no pude verles pero si escucharles, como si estuviéramos en un bar de la calle paraíso o del río de la pila o de las llanas, la gente hacía botellón, era como una verbena, un karaoke gigante, fue divertido cantar venezia y marta tiene un marcapasos pero o estaba demasiado lejos o la mayoría de las canciones no las conocía, creo que al final me quedé en el primer disco, asi que menos mal que nunca pagué por verles.

El día que mi padre, que apenas lee, me devolvió kafka en la orilla, me dijo que se lo había leído, que le había gustado (a él que no le gustan las historias tristes) y lo que es más raro aún, cuando le dije que tenía más que si los quería y se los llevó, ese día me di cuenta que realmente éste estaba siendo un verano distinto y raro, lleno de cosas que se me escapan, lo mismo me pasa con los libros de murakami, me gusta leerlos, son adictivos, pero siempre me dejan en un estado difícil de explicar, una mezcla de alegría y melancolía, nunca se si me he perdido algo por el camino, llega el final y no lo entiendo del todo, siempre me quedo con la duda de si es eso lo que busca él, si está hecho aposta, si es él el que juega conmigo o soy yo que no me entero, así está siendo este verano, como un libro de murakami, una mezcla de fantasía y realidad. Este año se me está haciendo increíblemente largo, como es siempre el primer año en una ciudad nueva. Necesito mis vacaciones, las de siempre. Ayer la pareja me dijo que puesto que estan en malaga en ferias el campamento del toby ha sido interrumpido temporalmente, al pobre los fuegos artificiales le vuelven loco, así que no tendré recibimiento toby en la estación de maría Zambrano :(((... Tengo ganas de feria, a ver si convenzo a Mt para irnos de casetas, aunque sean las de día, y recordaremos nuestros veranos de veinteañeras, aunque miedo me da salir por nuestras zonas que alli siguen, pero han pasado demasiados años y ni la música ni nosotras tenemos nada que ver.




Trying to find it
Trying to find some words to say
Trying to hide it
Trying to remind me of that day
Looking around for an extra person in my life
To call my friend
And we're seen walking
And we're seen talking
Seems like there'll never be an end
Trying to find me out
Trying to hold it up
Trying to help it catch the sunlight
Trying to fold it up
Trying to make it fear the night
Looking around for an extra person in my life
To call my friend
We're seen walking
And we're seen talking
Seems like there'll never be an end
Trying to find me out



3 comentarios:

Scout Finch dijo...

Qué buena descripción hiciste de las sensaciones que produce un libro de Murakami. Ese estado de semi-consciencia en el que te dejan, esa sensación de "me estará tomando el pelo??" que no te acabas de creer, y lo mejor de todo, cuando al final te empapas de ese universo y te importa tres pitos que sea inverosímil, ya forma parte de ti. Y también, la enorme tristeza y melancolía que te dejan. Aún así, para mí "Kafka en la orilla" es una de las mejores novelas que he leído estos años.

Ánimos para pasar este verano que dices tan extraño, qué bien que te vayas unos días a la luminosa y alegre Málaga, y más si es feria. Quizás en las casetas la música que suene sea de esa que sólo toleramos en las casetas, pero qué bien que se lo pasa una allí!!

Por cierto, me gustó mucho la canción.

Saludos!!!

J Luís dijo...

¿Por qué a todos los que nos gusta Murakami acabamos tarde o temprano buscándo una descripción que haga justicia a la sensación que nos deja su lectura? Yo no sé como lo consigue, pero la verdad es que lo consigue. Nunca he entendido la reivindicación que se hace ahora de los Hombres G. Me parecieron un grupo ramplón en su momento y ahora también. Vamos, que muy bien por no pagar, Viola. Por cierto, ya que hablas de "Venezia": una de las canciones más bonitas de este año, "You remember the good times, but the good times don´t remember you", de Joel Alme, tiene un arreglo orquestal que parece sacado directamente de su estribillo.
Te dejo el enlace de Spotify:
http://open.spotify.com/track/0F3ZDeWbEZXGDlzFZvaGW0

Muchos besos desde JPD.

Viola Tricolor dijo...

Hola atticus, málaga sigue tan luminosa como siempre, agosto la sienta muy bien.
Estos días no he leído a murakami pero si a amelie nothomb.
Gracias por seguir pasandote por aquí, un beso!

hola J Luís, yo creo que es imposible describir esa sensación, por eso le doy tantas vueltas.
A ver cuando puedo escuchar la canción que ya tengo ordenador pero me dejaron sin sonido! tengo bajado ese disco, puede que fuera porque tú hablaste de él? Besos.